nuestra historia

Los engastes de cristal de Swarovski cobran vida gracias a nuestras técnicas exclusivas, como es el caso del Pointiage, que confiere una cualidad de extrema precisión a los trabajos realizados a mano. Nuestra atención al detalle garantiza la máxima calidad en todas y cada una de las piezas. Esta experiencia queda patente en cada paso del proceso creativo, desde los bocetos del diseño inicial hasta el montaje.

El proceso creativo de Swarovski es increíblemente prolífico, desde la recopilación de información inspiracional hasta el lanzamiento de la colección. Gracias a un marcado interés por la selección de tendencias, el diseño y el desarrollo meditado de la marca, cada pieza narra una historia y encarna los más de 120 años de dominio de la técnica artesanal. Por su constante evolución de materiales y técnicas, Swarovski es una marca líder en creaciones de cristal tallado.

En su histórica sede central de Wattens, cada día se desarrollan nuevas tallas, tonos y tamaños que desafían los límites del cristal. El buen hacer de Swarovski no sólo se centra en el refinamiento del cristal, sino también en la búsqueda de métodos que hagan posible la creación de las piezas más increíbles. Los engastes de cuentas, pavé, bisel y garra son algunas de las técnicas utilizadas para realzar el brillo y conseguir un refinamiento exquisito.

En el siglo XX, Swarovski desvela increíbles posibilidades para los diseñadores de la alta costura. El “efecto Aurora Borealis”, desarrollado en colaboración con Christian Dior en la década de 1950, confiere a los cristales un fascinante acabado opalescente que ofrecerá al mundo de la moda todo un universo de posibilidades creativas. La moda brillaba por doquier, y también el mundo del cine. Los cristales hicieron su debut en algunas de las películas más emblemáticas del siglo, como “Los caballeros las prefieren rubias” o “Desayuno con diamantes”. El 19 de mayo de 1962, Marilyn Monroe canta al Presidente de los Estados Unidos ataviada con un vestido color carne cubierto del mejor cristal de Swarovski que, en 1999, se subastaría por 1,26 millones de dólares.

Tras décadas de colaboraciones creativas y de experiencia, Swarovski abre su primera boutique en la década de 1980. Empezaría así en todo el mundo la fascinación por la nueva marca de joyería y figuras de cristal. Con la introducción de la Decoración de Navidad Edición Anual Limitada, nace una nueva tradición para los coleccionistas de cristal de todo el mundo.

Durante más de 35 años, Swarovski ha cautivado al mundo con piezas únicas, como el anillo de cóctel Nirvana, la pulsera Slake y sus emblemáticos relojes con mecanismo suizo. En 2008, se implementa en tiendas de todo el mundo el mágico concepto de interiorismo «Crystal Forest», que permite a los clientes adentrarse en un espacio arquitectónico de fantasía elaborado con cristal. En la actualidad, la firma deslumbra con una campaña publicitaria protagonizada por Miranda Kerr, una mujer moderna que encarna a la perfección el espíritu y la esencia de la marca Swarovski.

En 1891, Daniel Swarovski tuvo la visión de crear “un diamante accesible para todos”. Inventó una máquina eléctrica capaz de tallar el cristal con mayor precisión que nunca, iniciando así una nueva era para el cristal. De las salas de jazz americanas a las firmas de costura parisinas, los vestidos se llenaban de cristales de Swarovski para reflejar el entusiasmo de los años 20.

Swarovski se enorgullece de asumir un compromiso de lujo consciente, promoviendo una actuación y actitud positivas en todo el sector. Nos comprometemos con la producción responsable, utilizando materiales del futuro que incluyen el cristal más responsable del mercado, y colaborando con terceros para mejorar las prácticas del sector y fomentar una actuación más sostenible de quienes usan el cristal de Swarovski. Para obtener información más detallada, visite el sitio web del Grupo Swarovski aquí.